Coincidiendo con el congreso internacional «Cartografía, organización naval y proyectos de defensa (siglos XVI-XVIII)», presentamos una exposición de libros y mapas del fondo antiguo de la Biblioteca Americanista de Sevilla que podrá visitarse en el horario habitual de la Biblioteca (8:30-18:30) del 22 al 28 de noviembre.
Como materiales representativos de instituciones marítimas españolas con proyección americana, se muestran las Ordenanzas generales de la Armada naval (1793) y las Ordenanzas de la ilustre Universidad y Casa de Contratación de Bilbao de 1737 (edición de 1794). Los frontispicios de ambos libros exhiben emblemas y elementos alusivos a la navegación, a las ciencias náuticas y a la defensa de los océanos. Se han incluido tres derroteros o libros con la descripción de las rutas de navegación, las posiciones de referencia para conducir las naves, los accidentes geográficos y los posibles peligros.
El Derrotero de las costas de la América Meridional (1844) está centrado en las costas de Brasil y destaca por sus láminas con las señas o vistas de los perfiles costeros, tal y como serían observados por los pilotos, para que fuesen fácilmente reconocibles. El Derrotero de las costas de España en el Mediterráneo, y su correspondiente de África para inteligencia y uso de las cartas esféricas (1787) está firmado por el marino y cosmógrafo gaditano Vicente Tofiño (1732-1795). El tercer ejemplar es la primera edición del Derrotero de las Islas Antillas, de las costas de Tierra-Firme, y de las del seno Mejicano (1837), elaborado por la Dirección de Hidrografía, siendo su director el marino e historiador Martín Fernández de Navarrete (1765-1844). La página seleccionada responde a un minucioso estudio sobre los fondos, arrecifes y rocas (incluyendo pequeños dibujos de los accidentes más significativos), que se realizó comparando las cartas de navegar y los derroteros disponibles con los diarios de navegación e informaciones más recientes.
La cartografía está representada en la exposición por dos cartas de navegar de la Dirección de Hidrografía de España, instrumentos que fueron creados para utilizar a bordo de los navíos. En la «Carta de la isla de Cuba» (1866) y en el «Plano de la Bahía de Cádiz» (1874) se aprecian los faros destacados en color amarillo y las observaciones de la profundidad y calidad de los fondos marinos realizadas con la sonda. El tercer mapa, «Carte Geo-hydrographique du Golfe du Mexique et de Ses Isles» (M. Rizzi-Zannoni, Burdeos, c. 1760), formaba parte del Atlas Moderne ou Collectión des Cartes sur toutes les parties du Goble Terrestre par Plusieurs Auteurs (Jean Lattré y Thomas Herissant, París, 1762). Este es un ejemplo de la cartografía dirigida al gran público, que fue elaborada de manera semejante a las cartas empleadas por los pilotos. Sin embargo, a pesar de su carácter ilustrativo y sintético, se aseguraba que estaba realizada «a partir de las memorias más recientes».
Esta exposición forma parte de las actividades de difusión del proyecto MAPWORKS, «Marcos de mapeo y prácticas de territorialización en América (siglos XVI-XVIII): espacios, categorías y representaciones» (PID2022-141020NA-I00).EXPOSICION Cartel01_300ppp